Pastel de naranja, una receta de pastel suave, esponjoso y húmedo, tan fácil que te sorprenderá

El olor a ralladura fresca vuelve la cocina un abrazo.
Este pastel tiene miga tierna, brillo cítrico y ganas de repetir.
No necesitas ser experto; solo seguir el ritmo de la masa, respetar el horno y disfrutar.
Ingredientes para el pastel de naranja
Antes de empezar, deja todo a la mano. Cocinar fluye mejor cuando nada interrumpe el proceso.
Procedimiento para hacer pastel de naranja
La clave está en atrapar aire, hidratar bien y hornear con paciencia. Cada paso suma textura y sabor.
- Mezcla la ralladura con el azúcar y frótalas. Libera aroma intenso.
- Bate mantequilla y aceite hasta ver una crema clara y esponjosa.
- Agrega los huevos uno a uno. Integra bien antes del siguiente.
- Tamiza harina, maicena, polvo y sal. Reserva cerca.
- Incorpora secos en tres adiciones, alternando con el jugo.
- Termina de mezclar con espátula. Debe quedar espesa y fluida.
- Vierte en el molde nivelado y da golpecitos para quitar burbujas.
- Hornea 55 a 70 minutos. Retira cuando el palillo salga seco.
- Reposa 15 minutos. Desmolda tibio y enfría sobre rejilla.

Secretos y consejos para conseguir el pastel perfecto
Pequeños ajustes marcan la diferencia.
Sigue estas pistas si quieres miga alta y húmeda.
- No sobrebatas después de añadir harina. Evita compactar la miga.
- Usa ingredientes a temperatura ambiente. Emulsiona mejor.
- Forra el molde con papel que sobresalga. Previene desbordes.
- Si tu horno dora rápido, cubre con aluminio y baja 10 °C.
- Calienta levemente el jugo. Profundiza el aroma sin exceso de líquido.
Errores comunes al hornear un pastel de naranja
Todos hemos tenido sobresaltos en el horno. Esta tabla te ayuda a diagnosticar y resolver sin drama.
Error | Solución |
---|---|
Se hunde en el centro | No abras el horno antes de 40 minutos. Bate bien huevos y grasas. |
Miga apelmazada | Tamiza secos. Mezcla al final lo justo. Evita sobrebatido. |
Muy dorado y crudo al centro | Cubre con aluminio. Baja 10–15 °C y prolonga el horneado. |
Sabor amargo | Evita rallar lo blanco. Mide el polvo químico con precisión. |
Textura seca | Agrega almíbar tibio después del horneado para devolver humedad. |
¿Cómo decorar mi pastel de naranja?
Un pastel casero también puede lucir espectacular.
Estas opciones son fáciles y llenas de color.
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Decoración con azúcar glass y ralladura
Espolvorea azúcar glass sobre el pastel frío y añade un toque de ralladura fresca.
Brinda un acabado elegante y un aroma vibrante.
Glaseado de naranja brillante
Mezcla 150 g de azúcar glass con unas cucharadas de jugo hasta obtener un hilo fluido.
Vierte en zigzag y deja secar al aire.
Cobertura de chocolate amargo
Derrite 120 g de chocolate con una cucharadita de aceite.
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Cubre la parte superior y bordes para un contraste irresistible.
Rodajas caramelizadas de naranja
Cocina rodajas finas en partes iguales de agua y azúcar durante 10 minutos.
Colócalas sobre el pastel para un toque brillante y dulce.
Decoración con frutas frescas y menta
Combina gajos de naranja con frambuesas o arándanos y unas hojas de menta.
Aporta color y frescura con un aroma increíble.
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Glaseado marmoleado de cítricos
Haz dos glaseados diferentes: uno con jugo de naranja y otro con limón.
Vierte ambos sobre el pastel y mezcla suavemente para un efecto artístico.
Pastel invertido con rodajas de naranja
Coloca rodajas caramelizadas en el fondo del molde antes de hornear.
Al desmoldar, el diseño brillante queda integrado.

¿Cómo conservar mi pastel de naranja sin perder sabor ni textura?
El cuidado después del horneado también importa.
Un pastel bien guardado conserva su humedad y su aroma durante días.
- A temperatura ambiente, guárdalo tapado en recipiente hermético hasta 48 horas.
- En refrigerador, dura de 3 a 4 días; sácalo 20 minutos antes de servir.
- Congélalo en porciones envueltas hasta por 2 meses. Descongela lentamente y humedece con un poco de almíbar tibio.
Cocinar un pastel de naranja es más que seguir pasos.
Es oler la ralladura y horno y esperar con paciencia el primer corte.
Incluso si algo no sale perfecto, cada intento enseña.
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La próxima vez quedará mejor, porque el verdadero secreto está en el cariño con que lo haces.
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