6 errores que cometes al besar y nadie te dijo antes
Un buen beso es sin duda una de las mejores experiencias que podemos compartir con alguien; sin embargo, si hablamos de un mal beso, la historia va a ser totalmente diferente.
Y es que, un beso mal dado, es un motivo más que suficiente para que una conquista amorosa termine por fracasar ¿Cómo puedes convertirte en un mejor besador(a)?
Te cuento 6 errores que debes evitar para “no meter la pata” en tu próximo intento ¡Empecemos!
Abrir demasiado la boca
Es normal sentir nervios al besar a alguien y más si es por primera vez. Lamentablemente, estos nervios pueden llevarnos a cometer actos impulsivos e incluso torpes; y un beso apasionado no significa que debe ser “brusco” o “exagerado”.
Lamentablemente, los besadores poco experimentados suelen abrir demasiado la boca ¡Un error grave! Ya que nuestra boca debe abrirse ligeramente, y lo suficiente para que nuestros labios se acaricien suavemente con los de nuestra pareja.
De lo contrario, el beso será incómodo, poco agradable y estéticamente burdo ante los ojos de terceros.
Querer meter la lengua cuando no toca
No intentes irrumpir abruptamente la boca del otro sin previo aviso o antes de tiempo; ya que generalmente resulta un poco desagradable.
En un principio, solo utiliza tus labios e introduce tu lengua suavemente, de forma acompasada y en su justa medida.
Además, no hay necesidad de meter demasiado profunda la lengua.
En su lugar, puedes juguetear un poco con su lengua o dentro de su boca; esto hará del beso algo apasionante, excitante y sumamente placentero.
Chocar los dientes
Esto es algo que a todos nos puede pasar. Sin embargo, no por ello nos escapamos de la incomodidad y la vergüenza que ocasiona.
Lo mejor que puedes hacer en estos casos, es dejar esos nervios de lado y centrarte en usar solo tus labios.
Igualmente, no olvides inclinar un poco la cabeza hacia un lado; ya que esto no solo ayudará a evitar el choque de dientes, si no que es ideal para prevenir un choque de narices que arruine el romanticismo y la pasión del instante.
Morder demasiado fuerte
Una mordida con suavidad y picardía durante un beso puede resultar muy excitante; pero es un acto en el que debes ser sumamente cuidadoso(a). Ya que si causamos daño a nuestra pareja la pasión podría perderse al instante.
¡Claro está! Que algunas personas disfrutan de un grado más “salvaje e intenso” en este acto.
Pero, si es la primera vez o no conoces a la persona, lo mejor será ir con más cuidado; o si no sientes seguridad, es preferible olvidar las mordidas por ahora.
Mal aliento
Esto podría parecerte algo obvio, pero nunca está demás recordar que no hay nada más desagradable que besar a alguien con mal aliento o con una pésima higiene bucal.
Ahora bien, pueden que existan diferentes problemas como la halitosis por ejemplo; y en estos casos, lo mejor es tener a la mano algunas mentas o chicles para cuando llegue el gran momento.
Así mismo, evita comer alimentos encebollados o con ajo; o fumar un cigarrillo previamente. Ya que aunque a no todos le desagrada, es mucho más probable que logres ahuyentar a tu pareja.
Besos muy simples
La realidad es que en el mundo de los besos no existen reglas escritas; sin embargo, podría resultar un auténtico aburrimiento un beso simple y sin imaginación.
Por esto, evita centrarte solo en la boca, existen muchas zonas erógenas como pueden serlo las orejas y el cuello por ejemplo.
Además, debes interactuar con la otra persona, por lo que quedarse quieto(a) debe evitarse.
Acaricia a tu pareja, tomala de la cintura, pasa tus manos por su cabello, o pecho, aprieta un poco con tus manos.
En fin, marca la diferencia para que el beso se sienta mucho más fluido y con un mayor grado de conexión.
¿Cómo se deben mover los labios al besar?
Al momento de un beso tus labios deben acercarse lentamente a los de tu pareja, siempre con cuidado y evitando choques de dientes o narices.
(Los labios deben estar humedecidos, ya que unos labios resecos y rasposos no suelen ser agradables).
Relaja los labios y mantenlos entreabiertos, y nunca apretados con demasiada fuerza (Esto es algo común si te dejas llevar por los nervios).
Además, no es la mejor idea empezar a besar directamente con los labios abiertos, ya que pudieras demostrar poco control o que “vas demasiado rápido”.
Asimismo, mantén tu lengua quieta en un principio y céntrate en juguetear un poco solo con los labios.
Una vez aumente la pasión del beso, puedes jugar suavemente con la punta de la lengua.
Haz movimientos lentos con los labios y lengua para que tu pareja se adapte fácilmente y pueda seguirte sin problemas.
Lo demás es permitir que todo fluya con naturalidad y al ritmo del momento; espero haberte ayudado y deseo !Que disfrutes mucho los besos! Hasta la próxima.
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