¿Qué es la aceptación y cómo conseguirla?

La aceptación es un concepto corto en definición, pero amplio para los aspectos en la vida en los que es importante tenerla presente.

Y actualmente, en las que nos vemos expuestos a muchos tipos de contenidos, es muy fácil pensar cosas como "cómo me gustaría poder hacer, tener aquello o ser así"

Esto es más común de lo que parece y lo hacemos de manera natural, pero cuando comienza a ser constante o empezamos a quejarnos por casi todo o todo sobre lo que no tenemos o somos, la autoestima comienza a verse afectada, por ello es muy importante desarrollarla.

¿Cuál es el significado psicológico de la aceptación?

En psicología la aceptación se refiere a la capacidad de identificar y reconocer la realidad de la persona, en su entorno externo como en lo interno.

Esto para poder saber que sí podemos cambiar para modificarlas y que no para incorporarlas sin quejas o excusas, en algunos casos reconocerla para evitarla o confrontar esa realidad de una mejor forma.

Por lo tanto, es una habilidad que podemos ir desarrollando para poder ser más tolerantes ante lo que no podemos cambiar, o que no dependen solo de nosotros.

¿Qué significa ser aceptada para las mujeres?

Con las mujeres la aceptación suele verse de una manera más social, en aspectos de cuidar la reputación y tener mayor presión social sobre cómo debería ser.

Esto en corto y largo plazo puede traer consecuencias relacionadas a la incomodidad, confusión e incluso de miedo de no cumplir ciertas normas.

Algunas son el culto a la belleza, roles específicos, conductas esperadas.

Se podría decir que en algunos casos que la aceptación viene desde la previa validación del entorno, lo que las puede llevar a adoptar posturas donde carece la autoaceptación y pasar aceptar de forma pasiva al entorno (resignación).

Características de la aceptación

Algunas características que las personas muestran cuando la tienen desarrolla son:

• No suelen tomarse las situaciones personales.
• Trabajan en su autoestima.
• Son genuinas.
• Se conocen a sí mismas.
• Suelen tomarse las cosas con humor.
• No son de aferrarse a una sola idea.
• Se muestran confiadas ante los demás.
• Se permiten quejarse y cuestionar para tener respuestas y pensar en soluciones.

¿Cuáles son los distintos tipos de aceptación que existen?

• Autoaceptación o aceptación personal. Es la forma en que nosotros nos aceptamos, con virtudes, defectos y nuestro aspecto.
• Aceptación Social. Se refiere al grado aceptación que nos dan los demás, ya sea en un equipo, grupo o comunidad.                                                                                                                                                            Este punto también habla acerca de que nos deben aceptar como personas, sin discriminación de algún aspecto.
• Aceptación del entorno. Este es uno donde se tienen más cosas que no podemos cambiar, se refiere a todos esos elementos que nos rodean y de los que no tenemos control.

Algunos ejemplos son: los cambios climatológicos, las leyes, las demás personas, normas en espacios de trabajo, etc.

¿Cómo conseguir la aceptación de los demás y la de uno mismo?

Con respecto a ser aceptado por los demás, es importante que recuerdes que no tienes que buscar que el 100% de las personas te acepten.

Busca personas con los que tienes temas afines, trabaja en tus habilidades sociales como la empatía, la escucha activa, la asertividad y sobre todo se tú mismo.

Estos elementos son a los que prestamos atención, quienes nos comprendan, nos divirtamos y tengamos claridad en la relación de cualquier tipo, y saber con quién estamos tratando.

Entonces, un elemento importante para ser aceptados es ser nosotros mismos y para llegar a ello, desde mi experiencia, se necesitan 5 cosas:

• Autoconocimiento. Saber que quien eres, que quieres, tus fortalezas y debilidades.
• Escuchar diferentes perspectivas sobre una situación. Este punto se suele dejar afuera, pero si trabaja a nivel interno porque permite que tengamos una postura propia.
• Percepción y confianza hacia uno mismo. Esto te va a permitir tener la convicción íntima de tener valor como persona.
• Desarrollar inteligencia emocional. Esta es la que te ayudará a conocerte a nivel emocional para después poder mostrarlo de forma adecuada a los demás y tomar mejores decisiones.
• Permitirse enfrentar desafíos. Ponte desafíos, ver que tan cerca estas de lograr cosas o que eres capaz de hacerlas te ayudará a mejorar tu autoestima.

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